4.15.2007

Relato: El tiempo

Aquí dejo una curiosa y personal visión, de mi buena amiga Yolanda, de algo tan abstracto como puede llegar a resultar el tiempo… a ver si se anima y me hace llegar más textos suyos.


El tiempo

El inexistente tiempo pasa rápido y veloz deja los surcos de su paso en el cuerpo y en los sentidos del alma, esa que acoge todo cuanto acontece en la vida de cada uno de nosotros.
Hoy miro en el espejo de algunos años atrás y puedo tener conciencia de que “el” todo lo calma.
El tiempo nos acoge en su regazo como si fuésemos bebes en pleno llanto y pataleta, para acunarnos y enseñarnos su sabiduría en el mañana.
Aquel mañana que ya no duele, aquel mañana solo hace que te percates de que la más complicada lección es la vida misma y que aquello que más duele es lo que mas enseña, lo que mas fuerte te hace.

Yolanda

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"El tiempo nos acoge en su regazo como si fuésemos bebes en pleno llanto y pataleta."

Profunda reflexión. :D


Muy buena la imagen.

Un beso.
Hibris

Azhaag dijo...

Si, es que ella es muy profunda cuando quiere :D jejejeje.

Azhaag